Inicio Teletipos

Investigadores de la UMA avanzan en nuevos materiales hacia la electrónica del futuro

Investigadores de la UMA avanzan en nuevos materiales hacia la electrónica del futuro

Iratxe Arrechea, Alexandra Harbuzaru y Guzmán López.

MÁLAGA.- Investigadores de la Universidad de Málaga avanzan en el estudio de nuevos materiales orgánicos que permitan una tecnología económica, plástica y sostenible que sustituya a la actual, basada en el silicio.

Desde el 'Laboratorio de Fabricación y Caracterización de Transistores de Efecto de Campo', ubicado en la Facultad de Ciencias de la UMA, los científicos Iratxe Arrechea, Alexandra Harbuzaru y Guzmán López, dirigidos por la investigadora Rocío Ponce, trabajan en la caracterización físico y química de materiales orgánicos y estudian su comportamiento en dispositivos electrónicos.

"Nuestro objetivo es lograr dispositivos más eficientes y flexibles, compatibles con el medio ambiente", afirma Rocío Ponce, una de las investigadoras con una carrera más prometedora de la Universidad de Málaga. "Buscamos suplantar los materiales inorgánicos, hasta ahora los más extendidos en el mercado, que tienen menor procesabilidad y son más costosos", continúa.

Su último trabajo, con el que han conseguido un "sistema muy eficiente y novedoso como semiconductor tipo n", es decir, que transporta cargas negativas, ha sido reconocido por la revista internacional 'Angewandte Chemie', una de las tres publicaciones de mayor impacto en el área de Química en todo el mundo, consiguiendo, incluso, aparecer como 'back cover', es decir, como artículo destacado en la portada trasera de la revista.

"Hemos creado una estructura molecular rígida compuesta por grupos ricos y grupos deficientes en electrones. Tras modular las propiedades electrónicas del sistema, hemos logrado semiconductores tipo n que, debido a su 'planaridad molecular' presentan un transporte de carga muy eficiente", explica Ponce, quien también destaca que este nuevo material puede usarse como unidad estructural para conseguir otros.

Un paso adelante que se traduce en una electrónica biodegradable, basada en sistemas plásticos y/o transparentes, y que es capaz de adaptarse a cualquier superficie. "Esta es la principal ventaja, que supera la rigidez de los inorgánicos, pudiendo crear dispositivos que se pueden doblar o poner en la mano", aclara.

Un trabajo, que cuenta con un bagaje de más de 6 años, en colaboración con la universidad 'South University of Science and Technology of China', ubicada en Shenzhen, China

Aunque ya hay dispositivos orgánicos en el mercado, por ejemplo, el sector militar de Estados Unidos trabaja con ellos y, además, se utilizan ya en pantallas comerciales, el siguiente paso para alcanzar su inmersión plena en este, es mejorar su ciclo de vida, que, tal y como asegura Ponce, actualmente es más corto que el de los dispositivos fabricados con materiales inorgánicos.

"Lo que sí es una realidad es la impresión de circuitos a partir de impresoras modificadas que, en vez de tinta, utilizan una disolución de materiales orgánicos", aclara la investigadora de la Universidad de Málaga.

Rocío Ponce, del departamento de Química Física de la UMA, cuenta con varios reconocimientos nacionales a su carrera científica. Premio Jóvenes Investigadores 2015 de la Real Sociedad Española de Química en 2015, también, un año antes, recibió la beca 'L'Oréal-UNESCO Por las Mujeres en la Ciencia', que reconoce anualmente la labor de cinco jóvenes mujeres investigadores en España.

Nacida en Marbella, es titulada en Ingeniería Química y doctorada en Química por la Universidad de Málaga. En octubre de 2008 se incorporó al grupo de investigación que dirige el Profesor Tobin J. Marks (Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica en 2008) en la Northwestern University (Estados Unidos) para realizar una estancia postdoctoral de tres años. A finales de 2011 se reincorporó a la Universidad de Málaga, consiguiendo posteriormente un contrato Ramón y Cajal, con el que cuenta actualmente.

Ir ARRIBA