A partir de enero se contará con seis profesionales más
MÁLAGA- El incremento del volumen de trabajo de los dos principales mataderos de la provincia de Málaga, pertenecientes al Distrito Sanitario Málaga-Valle del Guadalhorce, supone a su vez el aumento de la actividad para los veterinarios oficiales del SAS que trabajan a diario en estos dos complejos industriales.
Una labor que lleva consigo jornadas laborales complejas por sus horarios, turnos rotatorios de enorme exigencia y disponibilidad absoluta, puesto que el relevo de equipos no se produce hasta la llegada del siguiente.
Por ello, el Sindicato Médico de Málaga (SMM) no solo expresa su solidaridad y profundo respeto por la ineludible actividad de estos profesionales, también ha insistido en diferentes reuniones con algunos directivos del SAS y el propio gerente del Distrito Sanitario Málaga-Valle del Guadalhorce, sobre la necesidad urgente de actualización de las plantillas para adecuarlas a las necesidades reales de uno de los dos mataderos.
En este sentido, al incrementarse la actividad y los horarios, los mismos profesionales no pueden desarrollar su actividad de control sanitario de la misma manera y sin demoras o aplazamientos.
Por tanto, urgía aumentar y potenciar las plantillas de los veterinarios, pues además del componente legal, sus funciones de inspección y control sanitario deben desarrollarse en un marco óptimo, adecuado y de suficiencia de recursos.
Del mismo modo, en el otro de los dos mataderos existían necesidades de sustituciones de plantilla por diferentes asuntos y, sin ello, suponía un incremento de trabajo. Una situación que ya se ha solventado.
Así, el SMM, apoyado por el director de la Unidad de Protección de la Salud (UPS) del Distrito Sanitario Málaga- Valle del Guadalhorce, ha manifestado las necesidades apremiantes de cubrir los puestos de trabajo necesarios para abarcar el control sanitario oficial de carácter permanente (inspección del sacrificio de animales en mataderos) y no permanente (inspecciones basadas en riesgo en industrias alimentarias, toma de muestras, certificados de exportación, auditorías...), sin abusar de los profesionales que realizan dicha actividad con turnos excesivos.
Ante esta realidad y las constantes reivindicaciones de la vocalía A.1.4 de este sindicato al respecto y las gestiones reivindicativas de los responsables del Distrito Sanitario Málaga-Valle del Guadalhorce, el SAS ha comunicado que, a partir del mes de enero de 2026, se van a contratar a 6 veterinarios para apoyar al resto de la plantilla en el matadero y cubrir así todas las actividades de Control Sanitario Oficial.
Actividad
La inspección sanitaria de mataderos es realizada por veterinarios del SAS, específicamente por profesionales del Cuerpo Superior Facultativo de Instituciones Sanitarias, y tiene por objeto dictaminar la aptitud para el consumo de las carnes y derivados que se comercializan y ponen a disposición del consumidor.
Asimismo, realizan la función de antena o de centro de investigación y seguimiento de patologías, así como la comunicación de enfermedades de declaración obligatoria (EDO), en la actividad de inspección de animales sacrificados para el consumo humano en el matadero. El control sanitario que realizan los veterinarios de matadero permite conocer la circulación de patógenos e incluso la resistencia microbiana a antibióticos, pues continuamente se toman muestras para analizar su evolución.
El Distrito Sanitario Málaga-Guadalhorce ocupa una posición clave, ya que un porcentaje muy alto de los cerdos sacrificados en Andalucía para consumo humano se realiza en complejos industriales de su ámbito.
Son dos grandes empresas provistas de matadero, sala de despiece y fábrica de derivados cárnicos, que están situadas entre las diez primeras industrias cárnicas de España, conforme el ranking del sector cárnico. En ambos mataderos se sacrifican más de 2,5 millones de cerdos al año y se exportan carnes prácticamente a todos los continentes y de manera particular a Asia.
