El mapa también incluye corredores de sombra
MÁLAGA- El Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Sostenibilidad Medioambiental, ha elaborado un mapa de zonas de confort climático para mostrar a la ciudadanía los espacios que tiene a su disposición de forma gratuita, tanto al aire libre como en el interior de equipamientos públicos municipales, para poder resguardarse en episodios de altas temperaturas. Esta iniciativa se ha puesto en marcha en base a un estudio técnico adjudicado a Urban Forestry S. L. por 12.335,95 euros (IVA incluido) que recoge los criterios establecidos para la definición de zonas de confort climático, la relación de zonas y corredores ya existentes organizados por distritos, y las actuaciones necesarias para la creación y adaptación de espacios verdes urbanos para que puedan cumplir las condiciones para tener tal consideración en materia de mobiliario urbano, tomas de agua o elementos de sombra. Para el desarrollo de esta red se ha contado con la colaboración de la Cátedra de Cambio Climático de la Universidad de Málaga (UMA).

La concejala delegada de Sostenibilidad Medioambiental, Penélope Gómez, ha presentado en rueda de prensa esta nueva herramienta que puede consultarse en la web https://medioambiente.malaga.eu/parques-y-jardines/Areas-de-confort-climatico/. En este visor se pueden diferenciar tres tipologías de espacios: las zonas de confort exteriores, las áreas interiores y los corredores de sombra. Además, también ofrece la posibilidad de consultar la localización y la especie de los 110.000 árboles existentes en las calles, plazas y jardines públicos de los 11 distritos de la ciudad.
Zonas de confort climático
De acuerdo al estudio técnico en el que ha participado la UMA, se consideran zonas de confort climático exteriores aquellos espacios que están al aire libre, con una superficie de entre 0,33 y 0,5 hectáreas y que están considerados más refrescantes debido a la sombra proporcionada por las copas de los árboles o por la conjunción entre vegetación y arquitectura, la tipología de pavimento, el índice de reflexión y refracción de calor, la presencia de fuentes de beber o la existencia de mobiliario para sentarse o descansar. Actualmente, el listado está compuesto por 74 áreas concretas repartidas por todos los distritos de la ciudad.
En cuanto a las zonas de confort climático interiores, el mapa identifica los edificios municipales a los que la ciudadanía puede acceder y que garantizan unas condiciones térmicas adecuadas durante todo el año y disponen de zonas de descanso, agua potable e iluminación. En este apartado figuran bibliotecas, centros ciudadanos, juntas de distrito o equipamientos museísticos, con información sobre sus horarios de apertura. En total son 19 edificios. En este sentido, desde el Ayuntamiento de Málaga se ha invitado al resto de instituciones públicas y a entidades privadas de la ciudad a incorporarse a esta red de zonas de confort climático permitiendo que sus edificios figuren en este mapa.
Corredores de sombra
Por otro lado, el mapa también muestra 85 corredores de sombra donde, gracias a la cobertura vegetal de más del 50%, las temperaturas son más bajas que en el resto de la ciudad y, por tanto, recomendables como itinerarios para los desplazamientos a pie. El Paseo del Parque, la avenida de la Paloma, los Jardines de Picasso, la avenida de Andalucía, la calle Conde de Guadalhorce, la avenida Juan Sebastián Elcano, la calle Ingeniero de la Torre Acosta o los paseos de Limonar y Miramar son algunas de las alineaciones verdes incluidas en este visor, que está concebido como un documento vivo que se irá actualizando.
En este sentido, el Ayuntamiento está ultimando la licitación de un contrato para señalizar y mejorar distintos espacios mediante la dotación de bancos, mobiliario y más sombra mediante la plantación de árboles o la instalación de toldos para que tengan la consideración de zonas de confort climático y puedan cumplir esa función. Este servicio, que contará con un presupuesto de 108.000 euros, también incluirá la instalación de cartelería de estos puntos.
Esta actuación cuenta con financiación europea en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) dentro del programa de Planes de Sostenibilidad Turística en Destinos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, y además se incluye en el Plan Territorial de Sostenibilidad Turística de Andalucía 2022 de la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía.
Incremento del arbolado de la ciudad
En paralelo, el Ayuntamiento de Málaga continúa aumentando la masa arbórea, tanto en calles y jardines públicos de los 11 distritos como en las áreas forestales, como una de las principales medidas para mejorar la calidad del aire, proporcionar sombra, reducir las islas de calor y potenciar la biodiversidad al aportar un hábitat a especies de aves e insectos. Así, la campaña anual de plantación en suelo urbano, desarrollada entre octubre de 2024 y el pasado mes de marzo, se ha completado con la incorporación de 1.869 nuevos árboles, de los que 1.698 han sido plantados en la vía pública y en parques mientras los 171 restantes están ubicados en el interior de centros educativos. Hibisco, almez, naranjo agrio, lapacho rosado, flamboyán, ciclamor canadiense, sófora y pitanga son las especies más plantadas en esta última campaña. Se trata, en su mayoría, de árboles de porte medio, de forma que el desarrollo de sus raíces es menos invasivo en el subsuelo y el acerado.
De esta forma, en las últimas seis campañas se ha acometido la plantación de 8.101 ejemplares, con lo que el arbolado urbano (no los ubicados en zonas forestales) está integrado actualmente por 110.000 unidades, pertenecientes a más de 400 especies.
Además, sólo en los últimos cuatro años se han plantado 35.000 plantones de especies como algarrobo, almendros, pino, acebuche, almez o ciprés en las zonas forestales y parques periurbanos, con un índice de supervivencia por encima del 90%, en el marco de las campañas de reforestaciones que, con un presupuesto anual de 150.000 euros, persiguen aumentar la cubierta arbórea para mitigar el cambio climático, incrementar la captación de CO2 y cesión de oxígeno, disminuir la temperatura ambiente, frenar la erosión y velocidad de escorrentía, y favorecer la biodiversidad.