Una de las iniciativas mejor valoradas es el “Rincón de la calma”
MÁLAGA- El 83% de los pacientes que han pasado por la unidad de cardiología y cirugía cardiovascular del Hospital Regional Universitario de Málaga afirman haber utilizado las herramientas ofrecidas por el centro a través del “Rincón de la calma”, y consideran que estos recursos les ayudaron a mejorar su bienestar emocional durante el ingreso. Esta iniciativa, que lleva un año funcionando en el hospital, se enmarca dentro de la estrategia de humanización del centro.
El estrés es un factor de riesgo bien conocido en el ámbito cardiovascular, y su presencia se incrementa en situaciones de hospitalización. Conscientes de este impacto, y dentro de la línea de trabajo destinada a la humanización del centro hospitalario, el equipo de enfermería de la unidad cardiología y cirugía cardiovascular ha desarrollado un conjunto de herramientas dirigidas a ofrecer a los pacientes recursos útiles para afrontar de forma más tranquila su estancia en el hospital, entre las que se encuentra este “Rincón de la calma”, un espacio destinado a la meditación y con cartelería específica con consejos y herramientas para el control del estrés.
Desde el momento del ingreso, cada paciente recibe un tríptico informativo con técnicas básicas para el control del estrés. Este material es explicado personalmente por el personal de enfermería, que también realiza recordatorios diarios a los pacientes que lo necesitan, adaptando los mensajes al momento emocional de cada uno. Además, se ha instalado cartelería visible a la entrada de la unidad, de forma que tanto pacientes como familiares pueden acceder fácilmente a estas recomendaciones mientras pasean por la planta. Este proyecto no solo se ha centrado en ofrecer recursos, sino también en evaluar su eficacia, de manera que cuando reciben hospitalaria, los pacientes pueden cumplimentar una encuesta de satisfacción específica sobre el “Rincón de la calma”.
En este contexto, la experiencia de la unidad de Cardiología del Hospital Regional de Málaga se consolida como un ejemplo práctico de cómo es posible integrar el cuidado emocional dentro de las unidades clínicas más especializadas, con beneficios medibles tanto para los pacientes como para los profesionales que los atienden.
La enfermera de la planta de hospitalización de cardiología y promotora de esta iniciativa Beatriz Gómez, ha explicado que “el ingreso hospitalario puede ser un momento muy vulnerable para las personas, y muchas veces no basta con atender lo clínico. Enseñar a los pacientes a manejar el estrés desde el primer día contribuye a su bienestar general y complementa el abordaje terapéutico”.
Beatriz Gómez cuenta con formación de posgrado en Mindfulness y Compasión por la Universidad de Barcelona por lo que, además de coordinar el proyecto, imparte dos sesiones anuales de formación interna en la propia unidad, con el objetivo de que el personal de enfermería conozca y aplique herramientas específicas de regulación emocional en su práctica asistencial.