«Así comienza el fascismo. Nunca dice su nombre, gatea, flota, cuando muestra la punta de su nariz, decimos: ¿Es él? ¿Usted cree? ¡No estaremos exagerando! Y luego, un día se lo traga y ya es demasiado tarde para expulsarlo».
He querido comenzar mi cavilación marciana de hoy con esta reflexión de la periodista y política francesa FranÇoise Giraud; los grupos fascistas, los partidos de ultraderecha no nacen por generación espontánea. Los grandes capitales y las estructuras de poder, del verdadero poder, los medios de comunicación sufragados por los mismos y el desprestigio sistemático de la política y las instituciones crean una gran maraña de descontento, frustración e impotencia social. Vierten el veneno a través de las redes sociales, donde es imposible contrastar la información y cualquiera puede realizar un montaje. Componen un mantra que, a fuerza de ser repetido, cala en la ciudadanía, sobre todo entre aquellos que viven una realidad muy desafortunada en materia de empleo o de vivienda, los deheredados del presente y del futuro. Si a ello le añadimos que nuestra historia reciente no es objeto de una enseñanza rigurosa en los planes de estudio y que el populismo de orden y “libertad” tiene el terreno abonado entre la población más ignorante, ya tenemos el caldo de cultivo en el que se va a gestar la consolidación de los salvapatrias. Envueltos en banderas, consignas y cánticos identitarios ofrecen una razón de ser política a los más jóvenes, carentes de formación histórica e ideológica. Resucitan al macho, al hombre fuerte, el cual volverá a conquistar la autoridad perdida por los ataques del feminismo. Y los corderos, hijos de trabajadores y desclasados sociales, seguirán ciegamente al abanderado.
El pasado viernes 21 de noviembre tuvo lugar en Madrid una marcha convocada por La Falange, la cual fue denegada por la Delegación del Gobierno y posteriormente autorizada por el Tribunal Superior de Justicia. En ella se profirieron gritos racistas, xenófobos, discriminatorios, de apología del franquismo….y se gritó pidiendo un tiro en la nuca para Pedro Sánchez. Eso no es libertad de expresión, es incitación a un asesinato político.
Debemos recordar además que el artículo 62 de la ley de memoria democrática considera infracción “muy grave” los actos que “inciten a la exaltación personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra o de la Dictadura, de sus dirigentes, participantes en el sistema represivo o de las organizaciones que sustentaron al régimen dictatorial, cuando entrañe descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas o de sus familiares”.
No entiendo a qué están esperando las instituciones democráticas del Estado para frenar e ilegalizar si fuera preciso a los partidos políticos que propugnan y sostienen una ideología y unas prácticas contrarias a los derechos humanos.
Hay que tener en cuenta que algunas de esas instituciones ya han tomado partido por lo contrario. Baste referir lo ocurrido el 20 de noviembre, efemérides de los 50 años de la muerte del dictador Francisco Franco. El Tribunal Supremo anunció el fallo de la sentencia condenatoria en el juicio que se ha seguido contra el Fiscal General del Estado; una sentencia sin fundamentos jurídicos, sin exposición de hechos, sin valoración de la prueba. No me atrevo a pronunciarme sobre la inocencia o culpabilidad de Álvaro García Ortiz; no me siento cualificada para ello, pese a ser abogada.
Lo que me preocupa extraordinariamente es que el juicio ha sido un paripé, ya que la sentencia estaba puesta a priori y que el anuncio del contenido del fallo es un aviso a navegantes, un aviso en una fecha de nostalgia franquista para demasiados. Ha sido un juicio sin garantías. Eso es aterrador.
Y es que ya están aquí…o no se fueron nunca.
¿De qué sirve decir la verdad sobre el fascismo que se condena si no se dice nada contra el capitalismo que lo origina?
Bertolt Brecht
Porque hoy sigue siendo martes, te deseo mucho ánimo y mucha fuerza en el albor de estos tiempos tan oscuros.
A los que son capaces de escuchar la música a pesar del ruido reinante.





