Los ciudadanos hemos acusado recibo de su carta. Lo suyo, Sr. Sánchez, es puro teatro, falsedad bien ensayada, estudiado simulacro. Es la letra de una canción lanzada en 1969, ya entonces existían los teatreros y farsantes de amores y sin amores. Afirma usted que va a regenerar nuestra democracia. Ese estribillo de regeneración democrática lo usa todo mandatario al que le molesta la democracia, y no quiere decir otra cosa que “impondré una dictadura aprovechando los principios democráticos pues soy contrario a criticas y a cualquier pensamiento y tendencia que no sean los míos”.
Sus palmeros le apoyan: Ahí esta su ministro de transporte que lo califica en el mas amplio sentido de “puto amo”.
Tras su falsa comparecencia concede usted unas entrevistas en medios afines en los que sabe las preguntas y respuestas que se le va a realizar. De esa manera da usted la falsa sensación de controlarlo todo, pero usted sabe que no es así.
Usted, señor Sánchez, a lo que verdaderamente le teme es al pueblo. La voz del pueblo. La voz del pueblo que se manifiesta en las urnas a las que usted hará lo imposible por no asistir por ese temor a que el pueblo demuestre que no lo quiere.
Pero lo que si tiene usted claro es que la mentira que hasta ahora lo ha mantenido en el poder, la va a seguir usando. Habla usted de limpieza de fangos y diatribas contra los medios de comunicación que representan en una democracia el denominado cuarto poder y que son despreciados por usted denominándolos pseudo medios de comunicación. Claro, los que son medios libres y no están sometidos. Dicen en España que las mentiras tienen las patas muy cortas. Atento:
Newtrall. María Pascual.- “El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reapareció el 29 de abril tras cinco días de incertidumbre y dio una entrevista en TVE, donde criticó el “planteamiento” del líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, en relación a la esposa del socialista, Begoña Gómez. “El señor Feijóo ha dicho textualmente que lo que debería haber hecho mi mujer es quedarse en casa sin trabajar”, aseguró Sánchez (min. 35:34). ESTO ES BULO, MENTIRA, dicho por usted.
“El presidente volvió a repetir dicha afirmación –sin mencionar a Feijóo– el 30 de abril en Cadena SER: He tenido que escuchar que mi mujer lo que tiene que hacer es no trabajar, quedarse en casa con una mano encima de la otra” (min. 43:21). VUELVE A SER BULO, MENTIRA, dicho por usted.
Lo que dijo Alberto Nuñez Feijoo en la entrevista concedida a Onda Cero, contestando a la pregunta del un periodista de: “Usted tiene una mujer que tiene una carrera laboral y no le va a pedir usted que deje de trabajar, ¿no?”, le preguntó el periodista, a lo que Feijóo aseguró: “No, evidentemente. Ahora bien, lo que sí le voy a pedir es que no tenga contratos con la administración pública (…). Ninguna mujer de ningún presidente del Gobierno se ha visto envuelta en la situación en la que está el señor Sánchez y su pareja. Incluso hay parejas de presidente del Gobierno que han dejado de trabajar para no tener ninguna duda al respecto” (a partir del minuto 15:25). No citó a Begoña Gómez.
Señor Sánchez, vuelve usted a mentir. Aquí no hay posible cambio de opinión. Sencilla y llanamente MIENTE para estigmatizar y señalar al jefe de la oposición acusándole de hacer, justo lo usted hace: mentir, tergiversar, crear bulos.
Ha mentido usted para señalar al jefe de la oposición, a su compañera y a su hermana. La mentira es su bandera.
Es decir usted tratara de usar la mentira para someter al pueblo. Tergiversara la realidad para hacer ignorante al pueblo y mejor someterlo. Ocultara la realidad de sus actos dándoles un sentido distinto al real. Ignorara el portal de transparencia para ocultar el uso de los medios que una democracia pone a su alcance con la sola finalidad de destruir los pilares básicos de una democracia y empoderarse.
Sr. Sánchez, el pueblo no lo quiere, pero la grandeza de nuestra democracia hace que aún no habiendo ganado ninguna de la elecciones a las que se ha presentado, pueda gobernar con quienes quieren destruir España y engrandecerse ellos económicamente.
La historia lo juzgará por intentar destruir los valores esenciales de nuestra democracia cuya implantación en nuestra sociedad despues de los años del regimen franquista fue admirada en todo el mundo.
