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Humilladero de XI Pillin

Había un tiempo de activista de carrera, que pasada las primeras municipales de la democracia, me asesaba un mapa de la provincia en el que se me plantaban los resultados de hasta la más pequeña de las corporaciones malagueñas; por no mentar su fiasco en Casabermeja, se distinguía sobremanera la comunista Humilladero, el kremlinato-eurocomunista al bastón de mando de mi  desaparecido amigo “El Lolo”, Juan Francisco Gutiérrez; guardo de él afinadas discusiones cuasi ideológicas en su presidencia de la Comisión de Educación de la Federación de Municipios; en nuestras intimidades intuí que se llevaba así y así, con Antonio Romero, el afamado líder del PCE, vecino de la localidad.

Lo cierto era que ahora miro el mapilla y Auxiliadora Gámez, compañera socialista, rige a los ediles con el apoyo de IU, para mandar la derecha de paseo al Laberinto que recientemente se ha inaugurado, como otro atractivo de la comarca antequerana, unido a la  bullanguera estancia de flamencos rosas en la laguna de Fuente de Piedra. Doña Auxiliadora y don Siro, apasionados regidores, quieren que no se les evapore una gota de agua, pendientes de la varilla del “zahorí”, brujo tribal.

Encima los humilladerenses tan pronto se clausure la canícula, van a empezar las obras de sus dos fábricas chinas Hygreen y Sermatec, que según previsiones empezarán a producir a finales de 2026. Dos mil nuevos empleos se darán cita en el pueblo para los operarios de las empresas, con un censo local menor a 3500 habitantes: terreno urbanizable, agua, luz y más viandas serán necesaria para la  singular explosión demográfica para encontrar un nido, ni un charco.

 Llena de esperanza el acebuche cargando las pilas chinas, cercano al Puerto Seco de Cartojal, pero en el mar de los destinos me siembra de confusión las grandes inversiones del imperio comunista de Xi Jiping, en un territorio arado por el Soviethispano. Me perdí en su Laberinto.

Curro Flores

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