“La paz no es solamente la ausencia de guerra; mientras haya pobreza, racismo, discriminación y exclusión, difícilmente podremos alcanzar un mundo de paz”
He querido comenzar mi reflexión marciana de hoy con esta frase perteneciente a un gran escritor alemán, autor de La montaña mágica, Thomas Mann, crítico e ideólogo del primer tercio del siglo xx…..y he decidido comenzar así porque estoy renovando mis votos con el pacifismo…(aunque me he hecho el firme propósito de renovarlos con la izquierda actual, confieso que me está costando un poco más…)
Ando tan enfadada en los últimos años que, a menudo, necesito reconciliarme con las ideas básicas humanistas…. y con la fraternidad en particular… estoy convencida que sin amor fraternal es imposible la libertad y la superación del ser humano…nos han desactivado, nos hemos desactivado……es mucho más cómodo, sin lugar a dudas, practicar el “sálvese quien pueda” e intentar sobrevivir individual y aisladamente que luchar por un sistema que nos salve a todos….probablemente asistiremos a la primera extinción de una especie en la tierra por autodestrucción….para los que manejan el tablero de ajedrez del mundo, el cambio climático no es relevante….aburridos, juegan a la guerra una y otra vez por el mero placer de conseguir unos miles de milloncejos más…aparte del mayor estimulante del ego: EL PODER, el de verdad…el que dirige nuestro destino…los Iluminati y semejantes…
Confieso que, para renovar mis votos humanistas, realizo ejercicios espirituales cinematográficos…soy una cinéfila impenitente y empedernida…como he pasado muchos años, 25 por lo menos , en los que no he tenido tiempo de disfrutar de verdad de este pecado venial, ahora me someto a sesiones intensas e intensivas de buen cine…me he perdido muchísimas películas, muchas canciones, muchos libros…pero sé que las voy a recuperar…además tengo un maravilloso aliado…
Este fin de semana he visionado tres películas increíbles…dos de ellas ambientadas en la primera guerra mundial, la guerra que cambió los métodos tradicionales y modernizó las formas de matar a mansalva….la guerra de trincheras infinitas y la que propició el asesinato de más de 10 millones de jóvenes promesas de la vida….aparte de 20 millones de heridos (los heridos de aquella época no tuvieron los mismos medios que los de hoy)..
Los filmes son Feliz Navidad, que recrea un armisticio humano en el frente en la navidad del año 1914…tiene una sensibilidad exquisita…y el segundo, 1917, película rodada en modo plano secuencia, lo que nos hace partícipes y protagonistas de la trama…las recomiendo encarecidamente…
La tercera pertenece a otro género( no muy alejado)…se basa en unos hechos reales ocurridos en Dinamarca, los cuales permitieron la introducción en dicho reino de las ideas de la Ilustración, a cambio de la cabeza, literalmente hablando, del promotor…se llama Un asunto real…
Me enerva…me produce una frustrante impotencia que, no sólo no hemos aprendido sino que hemos perfeccionado los métodos de matar, de controlar…el ser humano eternamente enfrentado a su semejante….QUE TIENE LAS MISMAS NECESIDADES Y DESEOS DE PAZ!!!!!!!
Por ello, recomiendo encarecidamente que practiquemos el sano ejercicio de reencontrarnos con la decencia humana y política lo más frecuentemente posible…
“Es mejor una paz cierta que una victoria esperada”
Tito Livio
Porque hoy sigue siendo martes, te deseo mucha fuerza y mucho ánimo en esta era extraña (en la que adoramos al becerro de oro de la tecnología y la inteligencia artificial) que nos ha tocado vivir…
A mi amor…y a Lolo, a quien deseo que la tierra le sea leve..
